Sí a las primarias en los partidos políticos.
El partido político, tal y como lo conocemos en España está en grave crisis. Las cabezas pensantes de estas organizaciones, sean de la ideología que sean, no saben ya lo que hacer para frenar la pérdida de militantes de sus respectivas siglas. No saben si apostar por una estructura de organización de partido diferente, como en EE.UU o por el contrario, mantener la actual estructura, sin cambios en profundidad. Sea cual sea la mejor opción, lo que es evidente es que los simpatizantes no están por la labor de pagar grandes cuotas para llegar a ser militantes de su partido preferido, en la precaria situación económica actual. Desde el PSPV-PSOE hemos actuado en este sentido y a los sectores más desfavorecidos de la sociedad (desempleados de larga duración, estudiantes, pensionistas), con las últimas modificaciones puestas en marcha por la ejecutiva nacional liderada por Ximo Puig, la cuota que les queda a pagar es prácticamente testimonial, siendo una medida importante, para al menos, frenar la pérdida de militantes que arrastrábamos los socialistas valencianos desde hacía varios años.
Una de las causas de esta apatía del ciudadano para ingresar en una organización política, es la falta de democracia interna. En este sentido, los partidos más jóvenes, los que tienen menos bocas que alimentar y están menos condicionados por su pasado, son más proclives a practicar la democracia en el seno de sus organizaciones que los partidos históricos. Es cierto que se han llevado adelante procesos democráticos, primarias en partidos históricos, pero éstas se han presentado desde la propia organización, como un fracaso por no haber sabido imponer un candidato único. Si hubiesen podido evitar las primarias ‘las cabezas pensantes’, lo hubiesen hecho sin ningún tipo de miramiento. Prueba de ello son las primarias que se llevaron a cabo en IU en 2008, para elegir candidato a la presidencia del gobierno, donde Gaspar Llamazares se impuso a la valenciana Marga Sanz o las primarias entre Josep Borrell y Joaquín Almunia en el PSOE. Si los aparatos las hubiesen podido evitar, los candidatos alternativos (Marga Sanz y Josep Borell) no se hubiesen presentado.
Los partidos más jóvenes (CDL, UPyD, Ciutadans) la relación con el militante de base resulta mucho más fluida y son frecuentes las consultas. Desde luego, la elección a candidato, aunque sea a alcalde, se hace por medio de primarias. Se fomenta este sistema, se cree en él, no se pone en práctica cuando no queda otra alternativa o directamente no se pone en marcha y apuestan, como hacen algunos, por la ‘dedocracia’…
Dicho todo esto, no les queda otra a los partidos históricos que reinventarse y ser al mismo tiempo, históricos y modernos, si no quieren pasar al olvido, sobre todo los partidos de izquierdas. Desde la derecha se acepta con resignación cristiana que una persona de fuera de la organización decida el candidato, pero desde los partidos progresistas resultaría más complicado entender esta peculiar manera de orden interno. Para conseguir por lo menos el beneficio de la duda de una sociedad, muy escéptica con todo lo que venga de la política, hay que lanzar mensajes claros de que los partidos, han entendido el mensaje y que van a actuar como se les demanda desde la sociedad. En este sentido, desde el PSPV-PSOE lo tenemos claro; el próximo candidato a la Generalitat de nuestro partido, se decidirá por primarias, tal y como ha dicho nuestro secretario general. No es hora de medias tintas, es hora de actuar y desde los socialistas valencianos, desde la alternativa política al PPCV del presidente a dedo, el señor Fabra, lo tenemos claro.
Los ciudadanos perciben cuando un partido lleva adelante unas primarias a desgana, como último recurso, por la imposibilidad de imponer un candidato único y/o por miedo a que el partido se fracture. Que desde el PSPV-PSOE, años antes de elegir quién será el candidato, con tiempo para poder ‘evitar’ este mal trago a más de uno de los que se creen con el puesto asegurado en las listas electorales, que Ximo Puig ya haya adelantado en varios foros (el último en la Convención de alcaldes y concejales socialistas de Orihuela) que el próximo candidato socialista a la Generalitat, se decidirá por primarias, es un paso en la buena dirección, para recuperar parte de la ilusión del electorado progresista valenciano. Sólo creyendo en estos cambios democráticos profundos, que nos alejen radicalmente del PPCV, conseguiremos un cambio político en nuestra tierra. Con decisiones como ésta, vamos por el buen camino. Por el camino seguro para acabar con el ciclo conservador en la Comunitat Valenciana.
Manuel Sierra Tamarit.