PSPV-PSOE

XIMO PUIG, NUEVO SECRETARIO GENERAL DEL PSPV-PSOE

Ximo Puig se ha convertido este sábado, poco antes de las 15 horas, en el sexto secretario general del PSPV al imponerse en número de votos al actual líder del partido y candidato a la reelección, Jorge Alarte. El alcalde de Morella ha logrado 321 votos de delegados frente a los 179 de Jorge Alarte, mientras que ha habido 24 en blanco y 1 nulo. Puig ha logrado el 61% de los votos, mientras que Alarte ha sumado sólo el 34,09% y un 5,47% de delegados se ha abstenido o ha votado nulo.

En sus 34 años de vida, el PSPV-PSOE ha contado con cinco secretarios generales -Joan Pastor, Joan Lerma, Joan Romero, Joan Ignasi Pla y Jorge Alarte-, lo que convierte a Puig en el sexto.

Puig, de 53 años, ya presentó candidatura para la Secretaría General del PSPV en el Congreso Nacional de 2008, pero perdió frente a Alarte al lograr 20 votos menos. Nacido en Morella (Castellón) el 4 de enero de 1959, es periodista y ha trabajado en varios medios de comunicación.

En 1983 fue elegido secretario autonómico y diputado de Cultura en la Diputación de Castellón . De estos cargos dimitió al ser nombrado responsable de Cultura y Educación de la Comisión Ejecutiva del PSPV. Director del gabinete del presidente de la Generalitat con Joan Lerma, en 1995 fue elegido alcalde de Morella, cargo que mantiene en la actualidad.

Puig fue portavoz del grupo socialista en la Diputación y en 1999 encabezó la candidatura autonómica del PSPV por Castellón En el año 2000, fue nombrado portavoz del grupo parlamentario socialista y responsable de Relaciones Institucionales de la Comisión Ejecutiva Nacional del PSPV.

En las Corts Valencianes, Ximo Puig también ha sido vicepresidente segundo y portavoz adjunto. Después de las elecciones del pasado noviembre, es diputado en el Congreso.

Los discursos y el proceso de votación

Anoche, a las tres de la mañana, Puig y Alarte fueron proclamados candidatos. Ambos presentaron los avales necesarios para defender su discurso ante el plenario esta mañana. Los candidatos reconocían hoy que han dormido poco, fruto de las reuniones con delegados que han mantenido hasta el último momento, pero en este punto, las cartas ya están sobre la mesa.

El primero por turno en dirigirse a los delegados, Ximo Puig, ha apelado al optimismo del PSPV para hacer renacer al partido. “Es no es un club de fans”, ha llegado a decir, sino una cantera de ideas desde la que se han realizado las grandes transformacionesl de la historia. En ese bagaje ha destacado la lucha contra la corrupción “que va en el adn socialista”, en referencia a la tibieza con la que los afines a Alarte le acusan de haber apoyado los procesos de denuncia de casos de corrupción. Ha aprovechado la ocasión para reconocer la gestión de Ángel Luna, Andrés Perelló o Antoni Such en esta lucha para evidenciar que la medalla que se arroga Jorge Alarte “forma parte del activo del partido”. Y es que para Puig “criticar no es suficiente”.

El de Morella ha asumido “toda la responsabilidad en las derrotas del partido”, pero ha lanzado dardos a su adversario en referencia a la elección del secretario general por primarias abiertas. “No se puede decir una cosa aquí y hacer otra en Sevilla”, en alusión a la votación en contra de la primarias en el congreso del PSOE. “Nuevas ideas, nuevos equipos y siempre de izquierdas”, ha sentenciado antes de señalar que “vivir es omar partido”. Una abrumadora mayoría del plenario se ha puesto en pie para despedirlo.

Llegó entonces el turno para Jorge Alarte. En un tono más enérgico de lo habitual, ha basado su alocución en un ajuste de cuentas con el partido, que sólo horas antes había tumbado por un 60% su gestión. Ha hecho un llamamiento a los delegados de Manolo Mata y Francesc Romeu (algunos de estos últimos descontentos con el pacto Romeu-Puig) y les ha tendido la mano para que el congreso no se convierta en “una suma de desafecciones que no sirve para construir proyecto, sino para crear alternativas internas de poder”.

“El mayor de los esfuerzos no ha sido posible y no he sido capaz de llegar a un pacto por el socialismo valenciano”, dijo en referencia a su incapacidad para aglutinar o unirse a un proyecto unitario que defendía Ferraz. Alarte ha pedido también “todo el apoyo para el grupo parlamentario”, ya que ninguno de los otros aspirantes tiene acta de diputado en Les Corts.

En sus críticas más dirigidas, se ha referido a Puig sin citarlo para recordar que “ha estado en un cargo durante treinta años” y, en su opinión, no puede escribir el futuro del partido. “No sobra nadie, pero también es necesaria la inteligencia de saber a quién ponemos delante” tras este “11 congreso bis”, en referencia a que el anterior cónclave y este han resultado una foto fija del PSPV. “Los militantes saben muy bien quiénes somos cada uno”, ha acabado diciendo.

ABC